Aporto, un proyecto de Inés Marugán

Siempre en continuo aprendizaje

IADE: ¿Cómo conociste IADE, y qué te animó a cursar con nosotros?
Inés Marugán: Cuando terminé  selectividad estuve dudando entre cursar la carrera de Arqueología o enfocar mis estudios hacia el sector del diseño.

Desde mi niñez, siempre me gustó hacer cosas diferentes y realizar todo tipo de trabajos en los que mis manos adquiriesen protagonismo. 

Finalmente, me animé a formarme en el ámbito del diseño de moda, e inicié mis estudios  en IADE  por su buena reputación. Posteriormente, sentí la necesidad de profundizar y explorar nuevos campos y decidí ampliar mis estudios en el sector del interiorismo.

Recuerdo mi etapa en IADE con especial cariño. Destacaría la cercanía del profesorado al alumno, obteniendo lo mejor de cada uno de nosotros. El nivel de exigencia es muy alto, suponiendo un reto continuo para los estudiantes y un deseo de intentar llevarles más allá.

Ines Marugán

IADE: ¿Qué hiciste tras finalizar tus estudios con nosotros y antes de comenzar tu proyecto personal: Aporto?
Inés Marugán: Durante todos estos años he vivido multitud de experiencias personales y profesionales que me han traído hasta aquí, y me han animado a embarcarme en este proyecto de emprendimiento.

Al acabar mi formación, trabajé como freelance en el sector del interiorismo, el diseño gráfico, y la moda. Llegué a crear una firma de moda masculina e incluso a  desarrollar labores en varias empresas de publicidad.

En el 2000, comencé en el Corte Ingles, en el departamento de Crear – Hogar. Realicé  tareas muy diversas, desde la realización y coordinación de proyectos de decoración a la selección de nuevas colecciones para las exposiciones del departamento, o  diseño de mobiliario para las nuevas colecciones en tienda, en estrecha relación con las firmas.

Paralelamente, seguí formándome; realicé un curso de escaparatismo comercial e incluso un Máster en maquillaje y caracterización para cine, teatro y televisión. 

Más tarde, en 2018, me surgió la oportunidad de colaborar con la firma de Becara como Encargada General de la apertura y lanzamiento de su nuevo espacio en Las Rozas. Fue todo un reto. Llevé a cabo el diseño, la gestión comercial y de comunicación para el conocimiento de este nuevo espacio y, a su vez, la coordinación y realización de proyectos de decoración e interiorismo.

Nace la idea "Aporto"

Inés Marugán: Hace un año, tomé la decisión de crear un proyecto de emprendimiento personal en el ámbito de la decoración, diseño e interiorismo, que tuviera como nexo la pintura.

IADE: Del interiorismo al arte decorativo ¿Cómo se produce esa evolución? ¿Siempre estuviste muy ligada al arte o fue un descubrimiento personal?
Inés Marugán: Desde pequeña, siempre he sentido una gran fascinación por la belleza y la estética en sus diferentes disciplinas artísticas, y un constante interés por descubrir nuevas líneas de expresión.

Desde mi primera experiencia con el arte en el Ballet clásico aprendí a sentir a través del movimiento y la armonía. Casi desde entonces pienso que lo que hacemos y quienes somos nos define en nuestra percepción.

Cuando comienzo un proyecto, creo que está presidido por la emoción del encuentro con lo nuevo y desconocido, que podría expresar cómo pretendo entender el arte: “la intención del alma por hacer visible lo invisible”

La búsqueda constante de equilibrio, belleza y armonía, me descubre un nuevo espacio donde poder investigar, crear y comunicar. Combinar formas, texturas, colores…recrear conceptos, fruto de mi recorrido y experiencia en otras disciplinas artísticas, me sirven como guía para realizar mi obra.

Esta visión, dentro del Interiorismo, me permite generar espacios singulares dotados de luz propia, movimiento y vida, intentando crear un espacio armónico entre el entorno y quienes lo habitan.

Los espacios al igual que nosotros están vivos y por tanto necesitan cambiar, transformarse y evolucionar.  

I: Entrando más en detalles… ¿Cómo es un día desempeñando tu trabajo actual ¿En qué consiste la idea principal de Aporto?
I.M: En mi interior, Aporto empezó hace más de cinco años como una manera de evadirme y expresar mi interior. Durante todos estos años, siempre me encontré con el hándicap de la falta de pintura decorativa como parte fundamental de los proyectos de interiorismo. 

La pintura es capaz de crear un ambiente mágico y diferente que no lo consigue ningún otro complemento. Dota a los espacios de su propia personalidad.

En realidad, los espacios que creamos son reflejo de lo que somos, hablan por nosotros a través de códigos que no siempre sabemos interpretar.

Esta es la filosofía de Aporto, crear experiencias y sensaciones a través de la pintura, donde el color, la forma y el volumen, juegan un papel fundamental para conseguir espacios diferentes y únicos.

I: En cuanto a la búsqueda de clientes, o contactar con particulares ¿Cómo lo llevas a cabo?
I.M: Empezar es difícil. Disponemos de muchísima información y múltiples opciones. Darse a conocer es una labor ardua y requiere de tiempo. No sólo se trata de pintar, hay que estar visible para que el público pueda conocerte y acceder a tu trabajo, lo que supone un gran esfuerzo y mucha constancia.

Personalmente prefiero que mi actividad profesional se desarrolle de forma cercana al cliente. Considero que una relación directa, permite captar y entender mejor lo que buscan las personas que se interesan por mi obra.

I: ¿Cuáles son tus principales medios de difusión?
I.M: Figuro en Marketplaces Internacionales, tengo mi propia web, y además difundo mi proyecto en Instagram y Pinterest.

I: ¿Crees que las circunstancias vividas en los meses anteriores afectarán de alguna forma al arte decorativo en cuanto a conceptos, colores?
I.M: Arrancar desde el imaginario social en el que hemos estado sumergidos de esta manera tan disruptiva, sin duda va a tener su consecuencia e influencia. 

Un espacio es capaz de generar emociones tan solo con observarlo. La psicología juega un rol de gran importancia en los diferentes ambientes. De hecho, la psicología ambiental estudia la relación entre los diferentes tipos de ambientes y cómo estos afectan a la conducta y al estado anímico de las personas.
El color y sus matices son una prueba palpable de cómo puede influir en el estado de ánimo de una persona. Cada color está asociado a un registro de emociones diferentes. De ahí, la importancia de aplicar la psicología en el diseño de interiores, en cualquiera de sus ramas o vertientes. 

En estos momentos, considero fundamental tener en cuenta las vivencias y características personales de cada cliente a la hora de crear un espacio singular. ¡Su espacio! Cada persona necesitará obtener sensaciones diferentes según sus vivencias en esta etapa de confinamiento.

Un futuro muy presente

IADE: ¿Tienes algún proyecto personal en el tintero?
Inés Marugán: En estos momentos, estoy preparando una exposición como artista emergente, en la Galería Blanca Soto en Madrid que se estrenará próximamente.

I: ¿Qué consejo les darías a nuestros estudiantes?
I.M: Que luchen por sus sueños; que pasen a la acción y confíen. La experiencia aporta confianza para afrontar retos nuevos y desconocidos. ¡Les animo a que experimenten con sus sueños!